En un mitin celebrado frente a la Torre Trump en Nueva York, el ex presidente Donald Trump anunció que, de ser electo nuevamente, ordenará a las autoridades federales “liberar” la ciudad de Aurora, Colorado, de lo que él califica como una “invasión migrante” por parte de pandillas. Durante su discurso, Trump centró sus críticas en la vicepresidenta Kamala Harris, acusándola de mala gestión en política migratoria.
“Enviaré a un gran grupo de fuerzas del orden federal para liberar Aurora”, afirmó Trump, señalando que el gobernador de Colorado está “petrificado” por la supuesta amenaza de pandillas, a las que describió como “venezolanas” con mejor equipamiento que el ejército de EE.UU. Instó al gobernador a tomar medidas decisivas.
Sin embargo, el alcalde de Aurora, Mike Coffman, quien es republicano, ha declarado que la idea de que la ciudad ha sido invadida por pandillas migrantes no refleja la realidad.
Trump también mencionó a Aurora como uno de los “pueblos tomados por pandillas migrantes” y prometió visitar la ciudad para mostrar a los ciudadanos “lo que les ha pasado”. Durante su intervención de 45 minutos, reiteró varias políticas que implementaría, como deportaciones masivas, la eliminación de “ciudades santuario” y la reinstauración del Título 42, que permitía expulsiones rápidas de migrantes.
Además, arremetió contra la aplicación CBP One, utilizada por migrantes para solicitar citas en la frontera, sugiriendo que está siendo manipulada por “jefes de carteles”. También criticó los permisos de trabajo temporales otorgados a migrantes de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití, afirmando que están afectando a la población local y compitiendo por empleos.
Trump concluyó su discurso resaltando que las comunidades afroamericanas e hispanas están siendo perjudicadas por la competencia de migrantes, enfatizando su visión sobre el impacto de la inmigración en la economía local.
Foto cortesía: Donald Trumo Facebook