WASHINGTON, DC – 08 de abril de 2025 – En una reunión en la Casa Blanca con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el presidente Donald Trump reiteró este lunes su controvertida propuesta de que Estados Unidos tome el control de Gaza, describiendo el enclave palestino como un “increíble y importante terreno inmobiliario”. La visita de Netanyahu, centrada en discutir la liberación de rehenes israelíes en Gaza y los nuevos aranceles impuestos por EE.UU., también sirvió de plataforma para que Trump reavivara su visión de transformar el territorio en una zona bajo dominio estadounidense.
“Tener una fuerza de paz como la de Estados Unidos allí, controlando y apropiándose de Gaza sería algo bueno”, afirmó Trump durante sus declaraciones junto a Netanyahu. El presidente sugirió nuevamente el desplazamiento forzado de los 2,1 millones de palestinos que habitan el enclave, asegurando que “muchos países” estarían dispuestos a recibirlos. Esta idea ha sido rechazada por aliados regionales y podría constituir un crimen de guerra según el derecho internacional.
Trump describió su plan como la creación de una “zona de libertad” donde “no se matará a la gente todos los días”, y calificó a Gaza como “un lugar fantástico donde nadie quiere vivir”. Además, cuestionó la decisión de Israel de retirarse del territorio en 2005 tras casi cuatro décadas de ocupación, iniciada con su captura en la Guerra de los Seis Días de 1967. “Se apoderaron de propiedades frente al mar y se las dieron a la gente a cambio de paz. ¿Cómo funcionó?”, ironizó, retomando su propuesta de convertir Gaza en una “Riviera” bajo control estadounidense.
Contexto de devastación
Las declaraciones de Trump llegan en un momento crítico para Gaza, donde la guerra entre Israel y Hamas ha desplazado al 90% de su población, según la Organización de las Naciones Unidas. Muchos residentes han tenido que huir repetidamente en medio de un conflicto que ha devastado la región. Netanyahu, por su parte, aprovechó la reunión para abordar no solo la situación de los rehenes, sino también las relaciones comerciales con EE.UU. “Vamos a eliminar el déficit comercial que tenemos con EE.UU.”, afirmó el primer ministro israelí tras el encuentro.
Polémica internacional
La sugerencia de Trump de desplazar a los palestinos y apropiarse de Gaza ha generado críticas tanto dentro como fuera de Estados Unidos. Organizaciones humanitarias y países vecinos han advertido sobre las implicaciones legales y éticas de un traslado forzoso, mientras que la idea de convertir el enclave en un proyecto inmobiliario estadounidense ha sido vista como una provocación en un conflicto ya profundamente polarizado.
Por ahora, las palabras de Trump parecen destinadas a mantener su postura de mano dura en política exterior, aunque no está claro cómo se materializarían sus propuestas en un contexto de resistencia regional y complejidad geopolítica. La reunión con Netanyahu subraya la alianza entre ambos líderes, pero también expone las tensiones latentes en torno al futuro de Gaza y la relación entre Washington y sus socios en Oriente Medio.
fuente de Imagen: El País
