Con el invierno a la vuelta de la esquina, el operador de la red eléctrica de Texas ha emitido una advertencia sobre la posibilidad de condiciones meteorológicas extremas, aunque confía en que las mejoras realizadas en la infraestructura de energía del estado ayudarán a mitigar los efectos de una posible tormenta invernal.
En una reunión celebrada este martes, el Consejo de Fiabilidad Eléctrica de Texas (ERCOT) informó que, a pesar de los riesgos de cortes de energía asociados con el frío extremo, la red eléctrica del estado está mejor preparada que en años anteriores gracias a las nuevas fuentes de generación de energía que se han incorporado recientemente.
Chris Coleman, meteorólogo de ERCOT, señaló que las predicciones apuntan a un invierno con temperaturas superiores a lo normal, pero con una probabilidad “superior a la media” de que se registren episodios de frío extremo, similares a los de años anteriores. A pesar de la tendencia de temperaturas cálidas en el estado, los episodios de frío extremo se han vuelto más frecuentes, especialmente en los últimos inviernos.
“Cinco de los últimos ocho inviernos, hemos tenido temperaturas que alcanzaron niveles críticos”, indicó Coleman. El pronóstico de este año muestra condiciones similares a las de 2021, cuando la tormenta Uri causó una crisis energética histórica. Aunque el meteorólogo aclaró que no se espera un evento de la magnitud de Uri, sí destacó que las condiciones actuales podrían generar un clima lo suficientemente severo como para poner a prueba la infraestructura eléctrica.
Las mejoras en la red eléctrica desde la tormenta Uri han sido significativas. ERCOT ha incorporado más de 10,000 megawatts de nueva generación desde noviembre de 2023, incluidos más de 5,100 megawatts de energía solar y casi 3,700 megawatts en capacidad de almacenamiento de electricidad. Estas incorporaciones, junto con los aumentos en la producción de gas natural y energía eólica, han ayudado a reducir el riesgo de apagones, especialmente durante los picos de demanda invernal.
Pablo Vegas, CEO de ERCOT, detalló que la red eléctrica del estado vio una demanda récord de 78,349 megawatts en enero, y que la capacidad adicional en la red ha reducido el riesgo de emergencias de un 11.6% el invierno pasado a un 8.7% para este año. Estas mejoras en la infraestructura son parte de un esfuerzo continuo para garantizar la fiabilidad del suministro eléctrico durante las épocas de mayor demanda.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, también destacó la preparación del estado para enfrentar cualquier tormenta invernal que pueda surgir. En una conferencia de prensa, aseguró que el estado ha reforzado la red eléctrica y aprobado legislación que garantiza un suministro de energía estable. “Estamos trabajando sin descanso para asegurar que el suministro eléctrico se mantenga firme, independientemente del tipo de tormenta que enfrentemos”, afirmó Abbott.
Desde la crisis energética de 2021, ERCOT ha implementado nuevas regulaciones para climatizar los equipos de generación y transmisión. Estas normas, que fueron establecidas por la Legislatura de Texas, han obligado a realizar miles de inspecciones a instalaciones clave, mejorando la resiliencia de la red ante condiciones extremas.
Sin embargo, las autoridades también han advertido que, aunque las energías renovables como la solar y la eólica son cruciales para la transición energética, su producción tiende a disminuir en invierno. Esto, sumado al aumento de la demanda de electricidad debido al frío, podría poner presión sobre el sistema en momentos críticos.
Durante la tormenta Uri, las bajas temperaturas afectaron a todas las fuentes de energía, desde las turbinas eólicas congeladas hasta los equipos de gas natural que no pudieron funcionar debido al frío extremo. A pesar de los avances, los expertos han señalado que aún persisten desafíos para garantizar la fiabilidad de la red en situaciones de frío severo.
En resumen, aunque el estado de Texas se enfrenta a un invierno que podría traer consigo episodios de frío extremo, las mejoras en la infraestructura energética y las nuevas normativas de climatización ofrecen un panorama más optimista en comparación con años anteriores. No obstante, las autoridades y los expertos continúan vigilando de cerca las condiciones meteorológicas y el comportamiento de la red para asegurar que la energía llegue a los hogares texanos en todo momento.
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