Ken Paxton, fiscal general del estado, rechazó la petición de la Administración de que el estado “cese y desista” de tener bajo su control Shelby Park, que se ha convertido en el epicentro de la inmigración irregular en la frontera.
Texas se está negando a cumplir una orden de “cese y desista” que interpuso la Administración Biden para que el estado deje de impedir el acceso a los agentes federales a una parte crítica de la frontera con México.
En una misiva al Departamento de Seguridad Nacional, el fiscal general de Texas, Ken Paxton, rechazó la petición de la Administración Biden de que el estado “cese y desista” de tener bajo su control Shelby Park, epicentro de la inmigración ilegal en la frontera suroeste, en Eagle Pass.
“Debido a que los hechos y la ley están del lado de Texas, el estado seguirá utilizando su autoridad constitucional para defender su territorio, y yo seguiré defendiendo esos esfuerzos legales en los tribunales”, indicó Paxton.
Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios este miércoles por la noche.
El consejero general del Departamento de Seguridad Nacional, Jonathan Meyer, ordenó esta semana al estado que dejara de bloquear el acceso de la Patrulla Fronteriza a unos 2.5 millas (3.2 kilómetros) de la frontera entre Estados Unidos y México que ahora está ocupada por la Guardia Nacional del estado.
Funcionarios del DHS dijeron el sábado que una mujer y dos niños se ahogaron en el río Grande después de que agentes de la Patrulla Fronteriza “fueron físicamente impedidos por funcionarios de Texas de entrar en la zona” bajo las órdenes del gobernador republicano, Greg Abbott.
El Departamento Militar de Texas disputó la declaración del DHS, y dijo que su personal estaba al tanto de un pedido de socorro, pero no había detectado a ningún migrante en apuros.
Un portavoz de la Casa Blanca criticó las políticas de inmigración de Abbott en respuesta a los ahogamientos, y afirmó en un comunicado esta semana que sus “maniobras políticas son crueles, inhumanas y peligrosas”.
En la carta de este miércoles, Paxton aseguró que cualquier sugerencia de que el estado era responsable de las muertes “es vil y, como ahora debe saber, completamente inexacta”.
El Gobierno de Biden ha amenazado con llevar el asunto al Departamento de Justicia si Texas niega a los agentes de la Patrulla Fronteriza el pleno acceso a la zona.
