El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, afirmó que la imposición de un arancel del 25% a las importaciones de acero y aluminio por parte del gobierno de Estados Unidos no está justificada, ya que México compra más de estos productos a su vecino del norte de lo que exporta.
Durante la conferencia matutina del Gobierno, Ebrard presentó datos que muestran un superávit para Estados Unidos en este sector, con una diferencia de casi 6 mil 897 millones de dólares a su favor. “Nosotros importamos más de Estados Unidos que lo que exportamos”, subrayó el funcionario, destacando que la medida carece de sustento económico.
El presidente Donald Trump firmó el lunes dos órdenes ejecutivas para establecer estos gravámenes de manera generalizada, afectando no solo a México, sino también a países como Canadá y Brasil. Según la Casa Blanca, los aranceles se aplicarán sin excepciones a nivel global.
Ante esta decisión, Ebrard anunció que el gobierno mexicano buscará dialogar con las autoridades estadounidenses, en particular con el secretario de Comercio que será ratificado esta semana, para demostrar que la medida no tiene justificación económica. “Si se llegara a imponer el 12 de marzo, sería inusual porque se impondría una tarifa al que le vendes más”, argumentó el secretario.
Ebrard también desmintió la justificación de Washington de que las exportaciones mexicanas de acero y aluminio a Estados Unidos crecieron un 1,678%, mostrando gráficos que reflejan que estas se mantienen en niveles similares a los de 2015, mientras que las estadounidenses han alcanzado su punto más alto.
“Es injusto, de acuerdo a los propios considerandos del presidente Trump, porque nosotros tenemos más importación de Estados Unidos que exportación”, enfatizó.
A diferencia de la primera administración de Trump (2017-2021), cuando los aranceles se aplicaron exclusivamente a productos mexicanos, en esta ocasión la medida abarca a múltiples países. No obstante, el gobierno de México insistirá en demostrar que la política comercial estadounidense no solo es injustificada, sino que también podría afectar la relación económica bilateral.
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