WASHINGTON, D.C. – Millones de estadounidenses recibirán un alivio financiero significativo tras la decisión del gobierno de Joe Biden de eliminar las facturas médicas impagas de los reportes de crédito. La medida, anunciada este martes, busca reducir las barreras económicas que enfrentan quienes han acumulado deudas debido a emergencias médicas, marcando un cambio trascendental en las reglas de acceso al crédito.
La nueva norma, emitida por la Oficina para la Protección Financiera del Consumidor (CFPB, por sus siglas en inglés), eliminará aproximadamente $49,000 millones en deudas médicas de los historiales crediticios de más de 15 millones de personas. Según estimaciones de la CFPB, esta medida aumentará las calificaciones de crédito en un promedio de 20 puntos y podría llevar a la aprobación de unas 22,000 hipotecas adicionales cada año.
Un cambio “transformador” para las familias
La vicepresidenta Kamala Harris calificó la norma como “transformadora” y destacó que “nadie debería verse privado de oportunidades económicas porque enfermó o experimentó una emergencia médica”. Harris también reveló que estados y gobiernos locales han utilizado fondos de ayuda de la era de la pandemia para eliminar más de $1,000 millones en deudas médicas, beneficiando a 700,000 estadounidenses.
La regla responde a estudios que muestran que la deuda médica es un mal indicador de la capacidad de pago de una persona. De hecho, las principales agencias de crédito, Experian, Equifax y TransUnion, comenzaron el año pasado a eliminar de sus informes las deudas médicas menores a $500.
Impacto en los prestatarios
La presencia de facturas médicas impagas en los reportes crediticios ha sido un obstáculo para que millones de personas puedan acceder a hipotecas, créditos automotrices o préstamos para pequeñas empresas. Al eliminar estas deudas, los prestamistas ya no podrán utilizarlas como criterio para evaluar la capacidad de pago de los consumidores, un cambio que amplía significativamente las oportunidades económicas para muchas familias.
Un paso hacia la justicia financiera
La administración Biden anunció en otoño de 2023 que trabajaría en la implementación de esta norma como parte de sus esfuerzos para abordar las desigualdades económicas. Al eliminar las deudas médicas de los reportes crediticios, el gobierno busca garantizar que una emergencia de salud no dicte el futuro financiero de una persona.
“Este es un paso crítico hacia la justicia financiera para millones de estadounidenses que han enfrentado deudas médicas no porque no quisieran pagar, sino porque no podían hacerlo”, señaló un portavoz de la CFPB.
La norma entrará en vigor en las próximas semanas, marcando un alivio tangible para quienes han cargado con el peso de deudas médicas y abriendo la puerta a un acceso más justo al crédito.
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