Los residentes de Cimarrón, un vecindario en la ciudad de Mission, siguen presionando a las autoridades para que aborden el problema del campo de golf, donde la vegetación ha crecido y preocupa la presencia de animales salvajes como víboras, jabalíes y coyotes.
“El estado actual del campo de golf está atrayendo animales no domésticos: coyotes, víboras, jabalíes. Animales que representan un peligro para los residentes de Cimarrón”, dijo María Guadalupe Tijerina, quien vive en la zona.
Según Lupita y otros vecinos, este problema comenzó hace unos tres años cuando la empresa encargada del mantenimiento del campo de golf dejó de hacerlo. La vegetación creció y atrajo a diferentes animales.
“Solía ser un lugar hermoso. Mis hijos crecieron aquí. He vivido aquí en Cimarrón durante 30 años. Era muy diferente al resto de las colonias de la Ciudad de Mission. Había áreas verdes, lagos”, recordó María Guadalupe.
Durante estos tres años, los residentes, las autoridades de la ciudad y la empresa que administra el campo se han reunido en busca de soluciones. En la reunión más reciente, hace unos días, se lograron avances importantes.
“Los vecinos expresaron su deseo de que Cimarrón se incluyera en el centro de aumento de zona sobre impuestos y de formar parte de un distrito público de mejoras. Más del 62 por ciento de los vecinos estuvieron de acuerdo”, señaló Rubén Plata, regidor de la Ciudad de Mission.
En resumen, la ciudad podría asumir el control del campo de golf, aunque esta es solo una propuesta que la empresa encargada debe analizar.
“La idea de que la ciudad asuma el control del campo de golf está sobre la mesa. Reconocemos que no tenemos experiencia en la gestión de un campo de golf, por lo que necesitaríamos la intervención de una tercera entidad para administrarlo”, agregó Rubén Plata.