El primer día del histórico juicio contra Donald Trump concluyó el lunes luego de extensas deliberaciones previas al juicio y el inicio del proceso de selección del jurado, durante el cual numerosos posibles miembros fueron excluidos debido a su incapacidad para ser imparciales.
La sesión terminó sin que se seleccionara ningún jurado, y se espera que el proceso continúe el martes.
Trump marcó un hito al convertirse en el primer expresidente en ser juzgado por cargos penales, un momento crucial tanto para la política estadounidense como para su propia trayectoria política y personal.
El ex candidato presidencial republicano se declaró inocente de 34 cargos relacionados con la falsificación de registros comerciales, delitos graves que podrían acarrear hasta cuatro años de prisión. Debe estar presente durante todo el juicio, que podría extenderse hasta ocho semanas.
El día comenzó con el juez Juan M. Merchán emitiendo decisiones sobre varias mociones procesales, mientras Trump observaba las pruebas desde su asiento. El juez rechazó una solicitud de la defensa para que se abstuviera del caso debido a un conflicto de intereses, y también dictaminó que los fiscales no podrían mostrar al jurado el video de “Access Hollywood” de 2005, en el que Trump hablaba de manera despectiva sobre mujeres. Sin embargo, los fiscales podrán abordar este tema durante el interrogatorio de testigos.
Los fiscales también solicitaron una multa de $3,000 contra Trump por publicaciones en redes sociales que, según argumentaron, violaron una orden judicial de no atacar a los testigos. Trump, a través de su plataforma Truth Social, calificó a su exabogado Michael Cohen y a la actriz Stormy Daniels como “dos tipos sórdidos” que han perjudicado al país con sus mentiras.
Después de estas deliberaciones, se procedió a la selección de 12 jurados y seis suplentes. Dada la notoriedad de Trump, este proceso resultó especialmente desafiante, con muchos posibles jurados siendo excluidos debido a su falta de imparcialidad.
Independientemente del resultado, Trump busca capitalizar el juicio, presentándolo como una persecución política diseñada para obstaculizar su posible carrera presidencial.
El proceso de selección del jurado continuará con interrogatorios a los posibles testigos y la evaluación de su imparcialidad. Se espera que este proceso dure una o dos semanas.
Los cargos contra Trump están relacionados con su campaña presidencial de 2016, específicamente por su presunta participación en un plan para suprimir historias escandalosas sobre él antes de las elecciones. Este es el primer caso penal de los cuatro presentados contra Trump en diferentes jurisdicciones, y es el único que definitivamente irá a juicio antes de las elecciones.
