Este lunes, el Ministerio de Sanidad del Gobierno de Hamás informó que al menos 40 palestinos perdieron la vida en una nueva ola de bombardeos y ataques israelíes en la Franja de Gaza. Además, 218 personas resultaron heridas en estos ataques.
Con estas nuevas víctimas, el número total de fallecidos asciende a 37,124, en su mayoría mujeres y niños, mientras que 84,712 palestinos han resultado heridos durante los más de ocho meses de devastadora ofensiva israelí. Esta ofensiva continúa avanzando hacia Rafah con el objetivo de controlar por completo la frontera con Egipto.
En las últimas horas, al menos 12 civiles perdieron la vida en diversos ataques en el norte, centro y sur de Gaza. Una vivienda en la ciudad norteña de Gaza fue bombardeada, cobrándose la vida de dos personas, y ataques aéreos en Rafah dejaron otros cinco muertos y una treintena de heridos, según fuentes palestinas.
Las tropas israelíes se retiraron de la zona oriental de Deir el Balah, lo que llevó a algunos residentes a regresar a sus hogares, solo para ser víctimas de nuevos bombardeos que causaron más muertes y heridos, según informaron fuentes palestinas a EFE. Equipos de defensa civil, independientes de Hamás, han trasladado al menos cinco nuevos cadáveres de esta zona a un hospital cercano.
Además, los aviones de combate israelíes atacaron las tiendas de campaña de los desplazados en al Mawasi, Jan Yunis, causando varios civiles heridos, según informó la agencia palestina Wafa.
Por su parte, el Ejército israelí aseguró haber allanado edificios y demolido bocas de túneles en Deir el Balah, donde abatieron a varios agentes de Hamás, incluidos miembros de su fuerza de élite Nukhba, así como a otros dos hombres armados en Rafah.
La llegada del secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, esta noche a Israel, tiene como objetivo impulsar unas negociaciones de tregua estancadas. Hamás ha pedido a Israel y EE.UU. que se comprometan a que una tregua en Gaza signifique el fin definitivo de la guerra.
