Más de 260 efectivos del Ministerio de Emergencias de Rusia se encuentran trabajando intensamente para mitigar las consecuencias de un vertido de petróleo en el litoral del Mar Negro, causado por los naufragios de dos petroleros. El incidente ocurrió el pasado domingo cerca del estrecho de Kerch, que conecta el Mar Negro con el Mar de Azov, durante una tormenta que afectó a la región de Krasnodar.
El vertido, resultado de los accidentes de los petroleros “Volgoneft 212” y *”Volgoneft 239”, ha afectado un tramo de aproximadamente 35 kilómetros de la costa. Hasta el momento, los rescatistas han retirado más de 12 toneladas de crudo y han limpiado 4,2 kilómetros de la línea costera. Las labores de limpieza se están llevando a cabo tanto de manera manual como con la ayuda de unas 50 máquinas especializadas en este tipo de operaciones.
“Estamos trabajando desde la localidad de Volna hasta Anapa, en la región de Krasnodar. Más de 260 especialistas participan en esta tarea”, informaron las autoridades a través de un comunicado oficial. La situación se ha vuelto crítica en algunas zonas, con residentes de las localidades afectadas reportando la aparición de animales cubiertos de petróleo, como pájaros incapaces de volar y perros inmóviles debido a la contaminación.
Para contener la expansión de la mancha de petróleo, los servicios de rescate han comenzado a instalar barreras flotantes de contención en la salida del estrecho de Kerch, con el objetivo de evitar que el crudo siga desplazándose mar adentro. Estas barreras tendrán una longitud de entre 150 y 200 metros y se espera que estén operativas en el menor tiempo posible.
El gobernador de Krasnodar, Veniamín Kondrátiev, aseguró que la situación está bajo control, aunque reconoció que la limpieza actualmente se realiza de manera manual debido a la falta de equipamiento especializado. Sin embargo, se espera que en los próximos días llegue maquinaria adicional proveniente de la compañía Transneft, lo que agilizará las labores de recolección y limpieza.
El vertido ha obligado a las autoridades locales a declarar el estado de emergencia en las localidades de Anapa y Vesélovka, en la península de Tamán, como medida para poder movilizar los recursos necesarios y coordinar las acciones de respuesta.
Los dos petroleros involucrados en el accidente son embarcaciones de más de 50 años de antigüedad, originalmente construidas para la navegación fluvial y posteriormente adaptadas para operar en el mar. El “Volgoneft 212” se partió en dos a unos 7-8 kilómetros de la costa, lo que provocó el vertido de crudo. Por su parte, el *Volgoneft 239* estuvo varias horas a la deriva antes de encallar cerca de la costa de Krasnodar.
Este vertido no solo ha puesto en riesgo el ecosistema marino de la región, sino que también ha afectado la economía local, particularmente el turismo en la ciudad de Anapa, un popular destino vacacional a orillas del Mar Negro. Las autoridades continúan trabajando para contener los daños ambientales y limpiar la zona afectada.
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