El Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes se reúne por primera vez este jueves como parte de la investigación que busca someter a juicio político al presidente, Joe Biden, una gestión impulsada por los republicanos que buscan conseguir registros bancarios del mandatario y su hijo, Hunter.
El presidente del comité, el republicano por Kentucky James Comer, aseguró esta semana que la audiencia sentará “las bases de un proceso de juicio político” y buscará presentar la evidencia que los republicanos de la Cámara Baja dicen haber descubierto sobre “el conocimiento y rol de Biden en las prácticas de negocios nacionales e internacionales de su familia”.
La audiencia programada para esta mañana, explicó Comer, contará con expertos legales y financieros que discutirán los “crímenes que los Biden podrían haber cometido al ganar millones (de dólares) a expensas de los intereses de Estados Unidos”.
Los testigos que comparecerán son: Bruce Dubinsky, un contador forense; Eileen O’Connor, exasistente del fiscal general en la División de Impuestos del Departamento de Justicia y Jonathan Turley, un profesor de leyes de la Universidad George Washington que fue testigo de los republicanos en 2019 cuando los demócratas iniciaron el primer proceso de juicio político contra el entonces presidente Donald Trump.
Los demócratas, por su parte, han llamado a Michael J. Gerhardt, un profesor de leyes de la Universidad de Carolina del Norte que también testificó en el primer impeachment en contra de Trump. Gerhardt además fue testigo de ambos partidos en el proceso que condujo al impeachment del expresidente Bill Clinton.
Hunter Biden, en el centro de las pesquisas
Los congresistas republicanos han señalado que indagan si Biden ayudó inapropiadamentea su hijo o se benefició de sus acuerdos de negocios. Han argumentado, sin evidencia, que Biden se involucró una trama de sobornos y que ha estado inmiscuido en los proyectos empresariales de su hijo.