La jueza federal que supervisa el caso por presunta interferencia electoral contra el expresidente Donald Trump fijó la fecha del juicio para el 4 de marzo de 2024, un cronograma que podría tener un impacto crucial en la carrera de 2024 por la Casa Blanca porque coincide con las primarias presidenciales republicanas y cae sólo un día antes del Supermartes (el día en que se decide un tercio de los delegados con votaciones en Alabama, Arkansas, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Minnesota, Carolina del Norte, Oklahoma, Tennessee, Texas, Utah, Vermont y Virginia).
Durante una audiencia celebrada el lunes, Chutkan escuchó los argumentos de los abogados de Trump y del Departamento de Justicia sobre cuándo podría fijarse el juicio del caso.
El fiscal especial, Jack Smith, propuso que el proceso comience en enero, con la selección del jurado a partir de diciembre de este año, mientras que el equipo de Trump dijo que debería retrasarse hasta abril de 2026, después de las elecciones presidenciales, en las que aspira a representar al Partido Republicano si gana las primarias.
“Estas propuestas están obviamente muy alejadas”, afirmó Chutkan, y “ninguna de ellas es aceptable”. La jueza dijo que Trump tendrá que dar prioridad al juicio, alegando que ella no cambiaría el calendario en función de las obligaciones profesionales de cualquier otro acusado, por ejemplo, si fuese el caso de un atleta profesional.
La ciudadanía tiene interés en una administración de justicia justa y oportuna, dijo Chutkan. El abogado de Trump dijo que ir a juicio el próximo año violaría los derechos del expresidente, señalando los millones de páginas de pruebas que los fiscales han entregado.
