Washington, D.C. – En un discurso de 19 minutos desde el Despacho Oval, el presidente Joe Biden cerró este miércoles por la noche su mandato de cuatro años, pidiendo paciencia a los estadounidenses para “sentir” los logros de su gobierno y emitiendo una advertencia sobre los desafíos que enfrenta el país.
Con un tono reflexivo, Biden no se enfocó en enumerar logros, sino en transmitir un mensaje sobre la importancia de proteger las instituciones democráticas y el espíritu de unidad que, según él, ha definido su carrera de más de 50 años en la política.
“Los frutos de una reconstrucción y transformación no siempre son inmediatos, pero los cambios profundos requieren tiempo”, señaló Biden, destacando que su administración sentó las bases para el progreso en áreas clave como la economía, la salud y el cambio climático.
Un legado en sus propios términos
Biden enmarcó su presidencia como un período de recuperación tras desafíos globales como la pandemia de COVID-19, la crisis climática y tensiones políticas internas. Sin embargo, evitó los triunfalismos y en su lugar, lanzó una reflexión sobre el camino que Estados Unidos debe tomar para preservar su democracia.
“Las divisiones no desaparecen de la noche a la mañana, pero es nuestra responsabilidad evitar que se conviertan en grietas permanentes”, afirmó.
El mandatario también destacó la importancia de dejar un legado basado en el diálogo y el respeto por las instituciones, advirtiendo que el debilitamiento de estas podría tener consecuencias irreversibles para la nación.
Un llamado al futuro
En su discurso, Biden apeló a la paciencia y a la confianza en el tiempo como juez de su mandato. “Las semillas que plantamos hoy no florecen de inmediato, pero si las cuidamos, traerán frutos para las próximas generaciones”, dijo.
El presidente saliente dejó claro que, aunque su tiempo en el Despacho Oval llega a su fin, su compromiso con el país y con la defensa de sus valores democráticos permanece intacto.
Un mensaje final
Biden concluyó su discurso con un llamado a los estadounidenses para abrazar la esperanza, la empatía y el trabajo conjunto, valores que él considera esenciales para superar los retos futuros.
“Este no es un adiós, sino un recordatorio de que todos somos responsables de construir el país que soñamos”, declaró Biden antes de despedirse de la nación que lideró durante los últimos cuatro años.
Su mensaje final, lleno de humildad y propósito, cerró un capítulo en la historia de Estados Unidos, dejando entrever la complejidad de su legado y las profundas esperanzas que aún guarda para el país.
Imágen cortesía N+