Las fuerzas israelíes llevaron a cabo un segundo ataque en menos de 24 horas contra el campo de refugiados de Yabalia, ubicado en el norte de la Franja de Gaza. Este nuevo ataque ha sido catalogado como “otra trágica masacre” por el grupo islamista Hamás, que tiene el control en ese enclave.
Este ataque resultó en “decenas de víctimas mortales y heridos”, según la agencia oficial palestina Wafa. Se detalló que el bombardeo se centró en el barrio de Falujah, dentro del mismo campo, y se estima que entre las personas fallecidas y heridas podría haber muchas mujeres y niños.
El grupo islamista Hamás, que gobierna Gaza, denunció que Israel ha cometido “una trágica masacre”, considerándola como “el segundo crimen consecutivo en el campo de Yabalia en menos de 24 horas”.
El martes, un primer y devastador bombardeo israelí en el campo de Yabalia resultó en la muerte de al menos 145 personas, según lo informado por fuentes hospitalarias a EFE.
De acuerdo con el Ejército israelí, el ataque tenía como objetivo un comandante de las milicias de Hamás, lo que resultó en su fallecimiento, así como en la muerte de otras cincuenta milicianos que se encontraban ocultos en túneles de la zona.
Aviones de combate israelíes lanzaron una gran cantidad de explosivos al subsuelo, lo que provocó la destrucción de los cimientos de los edificios de la zona, que tenía una alta densidad demográfica, y la demolición de numerosos inmuebles, de acuerdo con fuentes en Gaza.
Gaza enfrenta una grave crisis humanitaria debido al cerco casi total impuesto por Israel y la restricción de acceso a alimentos, agua, medicinas y combustible. Esta situación ha llevado a que muchos hospitales se encuentren al borde del colapso, con alrededor de 16 de ellos sin funcionar debido a la falta de gasolina y electricidad. Mientras tanto, el número de muertos y heridos sigue aumentando, afectando en su mayoría a niños y mujeres.
