El inicio del horario de verano (DST, por sus siglas en inglés) en Estados Unidos está programado para marzo de 2025, pero su futuro es incierto. La administración del presidente Donald Trump ha retomado el debate sobre la eliminación del cambio de horario, argumentando razones de eficiencia gubernamental y bienestar ciudadano.
Trump ha expresado en repetidas ocasiones su apoyo a mantener un solo horario durante todo el año, alineándose con investigadores del sueño que sostienen que los cambios de hora pueden afectar la salud. Actualmente, la mayoría de los estados del país sigue el horario de verano por aproximadamente ocho meses, mientras que Arizona y Hawái han optado por permanecer en horario estándar.
Un debate sin resolver
En el Congreso, los intentos de abolir el cambio de horario han fracasado en el pasado. La Ley de Protección contra el Sol (Sunshine Protection Act), que buscaba establecer el DST permanente, no logró suficiente respaldo. A nivel estatal, algunas legislaturas han aprobado o propuesto leyes para mantener un solo horario de manera permanente, pero estos cambios requieren la autorización del gobierno federal.
Una propuesta intermedia sugiere adelantar los relojes una hora en marzo y retrasarlos solo 30 minutos en noviembre, para luego mantener ese horario indefinidamente.
Elon Musk impulsa una votación popular
Elon Musk, quien encabeza el recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) bajo la administración Trump, ha promovido la idea de someter el cambio de horario a votación pública. Sin embargo, los antecedentes no juegan a favor de un cambio definitivo. En 1974, un intento de hacer permanente el horario de verano fue revertido en menos de un año debido a la insatisfacción de la ciudadanía.
Con opiniones divididas entre quienes prefieren el DST y quienes defienden la hora estándar, el Congreso aún no toma una decisión definitiva. Mientras tanto, los estadounidenses deberán prepararse para adelantar sus relojes en marzo de 2025, a la espera de una posible reforma en el futuro.
Imágen cortesía: El País