Este fin de semana, la vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, lanzó un fuerte desafío al expresidente Donald Trump, instándolo a que publique su historial médico en un momento en que su edad y estado de salud se han convertido en un tema relevante en la campaña presidencial de 2024. Harris, de 59 años, publicó recientemente un informe de su médico que la describe como una “mujer sana” capaz de asumir el liderazgo del país, poniendo presión sobre Trump, quien, a sus 78 años, sería el presidente más longevo de la historia de EE.UU. si es elegido.
Durante un mitin celebrado el domingo en Carolina del Norte, uno de los estados clave para las elecciones, Harris acusó a Trump de falta de transparencia, sugiriendo que el expresidente está eludiendo temas cruciales para los votantes, como su estado de salud y sus verdaderos planes para un segundo mandato. “Trump no está siendo transparente con los votantes”, afirmó Harris en un discurso que rápidamente resonó en los medios nacionales.
Harris criticó a Trump no solo por evitar la publicación de su historial médico, sino también por rehusarse a participar en un segundo debate con ella, así como por rechazar una entrevista con el reconocido programa 60 Minutes de CBS News, una tradición para los candidatos presidenciales. “Uno debe preguntarse: ¿tienen miedo de que la gente vea que es demasiado débil e inestable para liderar Estados Unidos? ¿Es eso lo que está pasando?”, agregó Harris.
La salud de los candidatos ha sido un tema recurrente en las elecciones estadounidenses, y la edad de Trump ha sido uno de los puntos de discusión en esta campaña. Sin embargo, el exmandatario ha evitado compartir detalles completos de su condición física en los últimos años, lo que ha generado dudas entre sus críticos.
Imágen cortesía de: Reuters