El lanzador estrella de los Yankees de Nueva York, Gerrit Cole, se someterá este martes a una cirugía de Tommy John en su codo derecho, lo que pondrá fin a su participación en la temporada 2025.
El equipo neoyorquino informó que Cole, de 34 años, fue examinado el lunes por el Dr. Neal ElAttrache en el Instituto Cedars-Sinai Kerlan-Jobe de Los Ángeles. ElAttrache, reconocido especialista y médico jefe de los Dodgers, será el encargado de realizar la operación.
“Esta no es la noticia que ningún atleta quiere escuchar, pero es el siguiente paso necesario para mi carrera”, declaró Cole en un comunicado. “Tengo mucho que dar, y estoy completamente comprometido con el trabajo que tengo por delante. Atacaré mi rehabilitación todos los días y apoyaré a los Yankees de 2025 en cada paso del camino. … No puedo esperar para volver al montículo, más fuerte que nunca”.
Cole sintió molestias después de su segunda salida de la pretemporada el pasado jueves. En dicho encuentro, el derecho lanzó una primera entrada perfecta y alcanzó una velocidad de 97,6 mph. Sin embargo, en la segunda entrada permitió un jonrón de tres carreras a Matt Wallner con un lanzamiento en el centro de la zona de strike. En la tercera entrada, Brooks Lee también le conectó un cuadrangular solitario con un conteo de 3-0 y una velocidad de 94 mph.
Cole firmó un contrato de 324 millones de dólares por nueve temporadas con los Yankees antes de la campaña 2020. En 2023, tras ganar el premio Cy Young de la Liga Americana, no hizo su debut en la temporada 2024 hasta el 19 de junio debido a una irritación nerviosa y edema en su codo derecho. Finalizó el año con un récord de 8-5 y una efectividad de 3.41 en 17 aperturas. En la postemporada, registró un récord de 1-0 con una efectividad de 2.17 en cinco salidas.
En sus 12 temporadas en las Grandes Ligas, Cole ha jugado para los Piratas de Pittsburgh (2013-17), los Astros de Houston (2018-19) y los Yankees de Nueva York (2020-24), acumulando un récord de 153-80 con una efectividad de 3.18.
Su ausencia representará un duro golpe para la rotación de los Yankees, quienes tendrán que encontrar alternativas para suplir la pérdida de su principal lanzador.
