Los líderes del G7, el grupo compuesto por las democracias más ricas del mundo, han suscrito una declaración comprometiéndose a abordar el “grave y creciente” riesgo asociado con las drogas sintéticas, como el fentanilo, mediante medidas y colaboración conjunta.
En su declaración conjunta, los jefes de Estado o de Gobierno de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y el Reino Unido reafirman su determinación para combatir “la producción, distribución y venta” de estas sustancias.
Se destaca en la declaración que estos compuestos, especialmente los opioides sintéticos como el fentanilo y sus derivados, así como el nitaceno, constituyen una emergencia sanitaria pública grave y en aumento, con un impacto devastador en comunidades y economías, resultando en cientos de miles de muertes.
El G7 se declara “listo” para liderar acciones internacionales concertadas que aborden la producción y el tráfico de drogas sintéticas, desarticulen las redes de financiamiento ilícito de traficantes e identifiquen las nuevas tendencias en drogas para prevenir su propagación.
Entre las medidas a tomar, se incluye la preparación de acciones coercitivas contra las redes de narcotráfico y su financiamiento, utilizando todos los medios disponibles, incluyendo acciones legales.
El grupo también se compromete a intensificar los esfuerzos para aumentar la conciencia, especialmente entre los jóvenes y personas vulnerables, sobre los efectos negativos del consumo de drogas, y solicita a sus ministros relevantes fortalecer la cooperación internacional en esta área crucial y promover campañas de concienciación pública.
Finalmente, el G7 hace un llamado a todas las naciones a unirse a la coalición global contra las drogas sintéticas y a implementar las medidas recomendadas.
Los líderes de estos siete países se reunirán para su cumbre anual a partir del 13 de junio en la región de Apulia, Italia, que este año ostenta la presidencia rotativa del grupo.