La artista colombiana Shakira logró eludir un proceso por fraude fiscal en España este lunes al llegar a un acuerdo de última hora con la fiscalía, comprometiéndose a abonar una multa de más de siete millones de euros.
Vestida con un traje rosa y grandes gafas de sol, Shakira llegó a la Audiencia de Barcelona poco antes de las 09:00 horas locales. Al inicio de la sesión, el presidente del tribunal le preguntó si reconocía su culpabilidad y aceptaba las penas impuestas, a lo que la cantante respondió afirmativamente con un “sí”.
Posteriormente, abandonó el edificio sin realizar declaraciones a la prensa. En virtud del acuerdo, aceptó una pena total de tres años de prisión, suspendida a cambio de una sanción económica y una multa de más de 7.3 millones de euros, que representa el 50% del fraude total.
Shakira, quien previamente ya había abonado 17.2 millones de euros al fisco español para regularizar su situación, evita así un prolongado proceso que habría explorado su vida en la ciudad donde residía con el exfutbolista Gerard Piqué antes de su separación el año pasado.
La cantante explicó a través de sus redes sociales y un comunicado las razones que la llevaron a declararse culpable, argumentando que su carrera y sus hijos estaban en juego, y que deseaba evitar años innecesarios de litigios judiciales.
“Tenía dos opciones: seguir luchando hasta el final, comprometiendo mi paz y la de mis hijos, dejando de crear canciones, álbumes y giras, sin poder disfrutar de mi carrera y las cosas que amo, o llegar a un acuerdo, cerrar este capítulo de mi vida y mirar hacia el futuro”, compartió la cantante.