Desde este lunes 18 de diciembre, Estados Unidos suspenderá temporalmente el procesamiento de trenes procedentes de México en Eagle Pass y El Paso (Texas), con el objetivo de asignar más personal al trámite de migrantes indocumentados.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) informó que sigue experimentando un aumento significativo en el flujo de migrantes en la frontera suroeste. También destacó un resurgimiento en el traslado de migrantes en trenes de carga por parte de contrabandistas, lo que ha llevado a la implementación de medidas adicionales en colaboración con las autoridades mexicanas.
Como resultado de la suspensión de operaciones en los puertos de Eagle Pass y El Paso, el personal reasignado brindará apoyo a la Patrulla Fronteriza para la detención de migrantes. Esta medida se suma a la orden de cierre en el paso peatonal del puerto fronterizo de San Ysidro (California) y en Lukeville (Arizona), donde la gobernadora Kattie Hobbs autorizó el despliegue de soldados de la Guardia Nacional para colaborar en la gestión de los indocumentados.
La CBP enfatizó que, en respuesta al aumento en el flujo migratorio, la agencia continuará fortaleciendo todos los recursos disponibles para procesar a los migrantes de manera rápida y segura.
Estas decisiones se han tomado en un momento en que el Gobierno del presidente Joe Biden está negociando con senadores de la oposición para fortalecer el sistema de asilo, a cambio de su respaldo a un gasto de más de 60 mil millones de dólares destinado a Ucrania.