El gobierno de los Estados Unidos ha anunciado planes para aplicar nuevos aranceles a una serie de productos chinos, incluyendo vehículos eléctricos, baterías, células solares, acero, aluminio y equipos médicos. Esta medida podría aumentar las tensiones entre las dos economías más grandes del mundo.
El anuncio llega en medio de una intensa campaña electoral, donde tanto el presidente Joe Biden como su predecesor republicano, Donald Trump, buscan mostrarse como los más firmes contra China.
Aunque los funcionarios estadounidenses argumentan que los aranceles no tendrán un impacto inflacionario significativo debido a su estructura, admiten que China probablemente considerará medidas de represalia. Sin embargo, el efecto a largo plazo de estos aranceles en una posible disputa comercial más amplia sigue siendo incierto.
Los aranceles se aplicarán gradualmente durante los próximos tres años, abarcando productos como vehículos eléctricos, células solares, jeringas, agujas, acero, aluminio y otros. Aunque actualmente hay pocos vehículos eléctricos chinos en los Estados Unidos, existe preocupación de que modelos de bajo costo, incentivados por subsidios del gobierno chino, puedan inundar el mercado estadounidense en el futuro cercano.
Las empresas chinas tienen la capacidad de vender vehículos eléctricos a precios tan bajos como 12,000 dólares, y sus instalaciones de células solares, acero y aluminio tienen la capacidad suficiente para satisfacer la demanda mundial. Las autoridades chinas afirman que su producción mantiene los precios bajos y facilitará la transición hacia una economía más verde.
Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, explicó que los aranceles aumentarán el costo de ciertos productos chinos y ayudarán a contrarrestar los intentos de China de dominar el mercado de tecnologías emergentes, lo que según ella plantea riesgos para la seguridad nacional estadounidense y la estabilidad económica.
Aunque los funcionarios gubernamentales insisten en que la decisión no está relacionada con la campaña electoral, Brainard señaló que los aranceles protegerán empleos en estados clave como Pensilvania y Michigan, que podrían ser determinantes en la elección.
Tras una evaluación de cuatro años del comercio con China, los aranceles sobre los vehículos eléctricos chinos aumentarán al 102.5% este año, en comparación con el 27.5% anterior. Esta evaluación se realizó en virtud de la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974, que permite al gobierno tomar represalias por prácticas comerciales consideradas injustas o violatorias de los estándares internacionales.
