El Ejército israelí dará un aviso tres horas antes de cada pausa, adelantó John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
Israel aceptó llevar a cabo pausas de cuatro horas diarias a sus ataques contra Hamas en el norte de la Franja de Gaza para permitir salida de civiles y la entrada de ayuda, dijo este jueves el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
Israel dará un aviso tres horas antes de cada pausa, explicó Kirby. El Ejército israelí aseguró a Estados Unidos que no habría operaciones militares en las zonas implicadas durante estas pausas, añadió Kirby.
“Nos sigue preocupando que Hamas impida la huida de civiles”, añadió Kirby. También hizo un llamado a que los civiles traten de salir de las zonas “activas” del conflicto, y también consideró “crucial” que la ayuda humanitaria se extienda a las zonas a las que se trasladan los civiles.
El portavoz de la Casa Blanca recordó que las pausas en el sur de Gaza han permitido la salida de miles de personas y la entrada de ayuda humanitaria, pero dicha ayuda tiene que aumentar.
Valoró así que 106 camiones hayan entrado al sur de Gaza por el paso de Rafah en Egipto, pero espera que esta cifra se eleve cuanto antes.
“Necesitamos ver más y necesitamos ver más pronto”, dijo kirby, quien consideró que deberían entrar al día 150 camiones de ayuda humanitaria, y aunque haya días que no sea posible, ese debería ser, al menos, el objetivo.
Kirby recalcó que Israel está luchando contra un enemigo (Hamas), que está “incrustado en la población civil, utilizando hospitales e infraestructuras civiles en un esfuerzo por protegerse” y pone en un riesgo mayor al “inocente pueblo palestino”.
Pero también insistió en que Israel tiene “la obligación de cumplir plenamente el derecho internacional” y consideró que estas pausas humanitarias son “un paso en la dirección correcta porque buscan que los civiles tengan “la oportunidad de llegar a zonas más seguras”.
Esperanza en la liberación de rehenes
Preguntado por si estas pausas forman parte de un acuerdo más amplio que conllevaría la liberación de rehenes, Kirby dijo que no iba a “negociar” en público.
Pero sí recalcó que Estados Unidos continúa trabajando con sus aliados en la región para tratar de liberar a los rehenes y consideró que estas pausas serán “útiles” para la salida “segura” de rehenes llegado el caso.
Pero en cualquier caso ya son útiles para otros propósitos como la salida de civiles, su traslado a zonas seguras y la entrada de ayuda, por eso insistió en que Estados Unidos “se alegra” de que Israel esté dispuesto a dar este paso que puede servir para “multitud de objetivos”.
Kirby subrayó la implicación directa del presidente estadounidense, Joe Biden, junto con otros cargos de la Administración, como el secretario de Estado, Antony Blinken, y el consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, en constantes contactos con Israel que han permitido estas decisiones.
Por otro lado, el portavoz de la Casa Blanca reiteró que Estados Unidos no cree que una ocupación indefinida de Gaza por parte de Israel sea “lo mejor para el interés de Israel ni del pueblo palestino”. Una posición que, recalcó, “no va a cambiar”.
Sí entiende Washington la necesidad de un periodo “transitorio” en el que las fuerzas israelíes estarían presentes, “pero eso no supone el gobierno de Gaza”, insistió Kirby.
Reiteró que el pueblo palestino tiene “derecho a determinar su futuro y cómo quiere ser gobernado”, así como contar con una estructura de gobierno que “cuide de sus intereses y les permita perseguir sus aspiraciones”.
“Y creemos absolutamente que la Autoridad Nacional Palestina debe formar parte de ese proceso”, añadió.