Washington D.C. — En una jornada marcada por las bajas temperaturas, Donald Trump ha jurado como el 47° presidente de los Estados Unidos en una ceremonia solemne celebrada en la Rotonda del Capitolio. Con el presidente de la Corte Suprema, John Roberts, administrándole el juramento, Trump inició oficialmente su segundo mandato al frente de la nación.
El magnate y político republicano utilizó para el acto dos Biblias cargadas de simbolismo: una personal, que ya había empleado en su toma de posesión en 2017, y la icónica Biblia de Abraham Lincoln, la misma que el presidente número 16 de la nación usó en su histórica ceremonia de 1861. Este gesto busca subrayar la conexión entre su liderazgo y los valores fundacionales de Estados Unidos, un mensaje clave en su discurso inaugural.
Un contexto único para un regreso histórico
Debido a las bajas temperaturas que azotan la capital, la ceremonia tuvo lugar en el interior del Capitolio, un hecho inusual en la historia presidencial. A pesar de ello, cientos de seguidores y dignatarios se congregaron para presenciar el regreso de Trump al poder, consolidando uno de los capítulos más polarizantes de la política moderna.
En su discurso tras jurar el cargo, Trump prometió un enfoque renovado y firme para “restaurar la grandeza de Estados Unidos”. Sus palabras subrayaron su intención de implementar cambios contundentes desde el primer día, en áreas clave como economía, inmigración y seguridad nacional.
Un segundo mandato cargado de simbolismo y expectativas
La ceremonia de juramentación ha sido vista por muchos como una demostración del estilo característico de Trump: un equilibrio entre la tradición y su visión disruptiva del liderazgo. Usar la Biblia de Lincoln —un símbolo de unidad en tiempos de crisis— y su propia Biblia personal refleja su enfoque dual de aferrarse a la historia mientras impulsa su agenda personal.
Con la promesa de un gobierno fuerte y enfocado, Trump inicia un segundo mandato que promete ser tan controvertido como transformador, en un momento crucial para Estados Unidos y su papel en el escenario global.
Imágen cortesía: CNN
