La Fiscalía de Filadelfia ha solicitado a la Justicia la suspensión de un controvertido sorteo promovido por Elon Musk, en el que se sortean un millón de dólares entre votantes registrados. Esta decisión se produce tras una advertencia de la Administración de Estados Unidos sobre posibles violaciones a la normativa electoral.
El sorteo, que Musk ya había llevado a cabo en Míchigan y Wisconsin con un total de dos millones de dólares, ha generado preocupación entre las autoridades. Larry Krasner, fiscal de distrito de Filadelfia, ha presentado una demanda civil contra Musk y su comité de campaña, America PAC, alegando que estos sorteos podrían interpretarse como un incentivo para el registro de votantes, lo cual podría infringir las leyes federales.
El Departamento de Justicia había enviado previamente una carta a America PAC indicando que estas iniciativas, catalogadas como “diarias”, podrían constituir un pago por el registro de votantes, algo prohibido por la ley electoral.
Elon Musk ha mostrado su apoyo al expresidente Donald Trump en su intento por regresar a la Casa Blanca, enfrentándose a la actual vicepresidenta Kamala Harris, quien busca frenar sus aspiraciones en las próximas elecciones. La situación ha puesto de relieve las tensiones entre el uso de estrategias innovadoras en la política y el cumplimiento de la ley electoral.
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