El futuro de Dak Prescott con los Dallas Cowboys está en duda tras sufrir una lesión durante el partido contra los Atlanta Falcons en la Semana 9 de la NFL. Aunque aún no se han confirmado los detalles precisos de la lesión, los pronósticos no son favorables, y se especula que el quarterback podría ausentarse entre dos y 12 semanas, lo que lo pondría en riesgo de perderse el resto de la temporada.
La lesión ocurrió en el tercer cuarto del encuentro, cuando Prescott experimentó dolor en la muñeca y, poco después, un mal movimiento le provocó un tirón en el tendón de la corva. El mariscal de campo de los Cowboys describió cómo se sintió durante el juego: “Lo sentí en la tercera jugada, un pequeño movimiento hacia la izquierda. Para ser honesto, no le di mucha importancia, pero en la siguiente jugada, al lanzar desde la ruta de parada, me lastimé. Era algo que nunca había sentido antes”, explicó el quarterback.
Prescott continuó relatando que, tras el incidente, intentó seguir jugando, pero pronto consultó con el personal médico del equipo: “Traté de caminar en ese momento y luego vi al equipo médico para preguntar si podía empeorar la situación si continuaba jugando”, agregó.
La posible pérdida de su quarterback titular sería un duro golpe para los Cowboys, que, tras sufrir su tercera derrota consecutiva, se encuentran en una situación complicada en la NFC Este. Este domingo, el equipo se enfrentará a un rival directo, los Philadelphia Eagles, en un partido clave para sus aspiraciones de postemporada.
En medio de una campaña llena de altibajos, la lesión de Prescott podría dejar a Dallas con pocas opciones de recuperarse si se confirma que el jugador se pierde un tiempo prolongado. La expectativa ahora gira en torno a los estudios médicos que determinarán la gravedad de la lesión y el tiempo de recuperación del quarterback, mientras los Cowboys se preparan para enfrentar a uno de los contendientes más fuertes de la división.
FOTO CORTESÍA: DALLAS COWBOYS
