Washington, D.C., 4 de octubre de 2024 — La Corte de Apelaciones de los Estados Unidos ha accedido a revisar una demanda presentada por el gobierno de México contra importantes fabricantes de armas estadounidenses. El país latinoamericano busca responsabilizar a estas compañías por el flujo de armamento que, asegura, ha alimentado la violencia del crimen organizado en su territorio.
México ha argumentado que la negligencia de los fabricantes contribuye a que las armas lleguen a manos de los cárteles, lo que ha provocado un aumento en los homicidios y otros delitos violentos. Según el gobierno mexicano, la mayoría de las armas utilizadas en crímenes violentos en México provienen de Estados Unidos.
Por su parte, las empresas demandadas han señalado que esta acción legal representa una amenaza a la soberanía de Estados Unidos, ya que cualquier medida que se tome contra ellas podría sentar un precedente para que otros países intenten regular a industrias estadounidenses bajo el amparo de sus leyes. Los fabricantes insisten en que el verdadero problema radica en la aplicación de las leyes fronterizas y en el tráfico ilegal de armas.
La demanda ha atraído atención internacional, ya que podría redefinir las responsabilidades de las empresas armamentísticas y el impacto transnacional de sus productos. Mientras la Corte se prepara para escuchar los argumentos de ambas partes, la decisión promete tener implicaciones profundas en las relaciones entre México y Estados Unidos, así como en las políticas de control de armas en ambos países.
La audiencia está prevista para los próximos meses, y se espera que el caso llegue eventualmente hasta la Corte Suprema de EE. UU.
Imágen cortesía: Cadena SER
