La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, rechazó nuevamente que el país sea responsable de la producción de fentanilo, como lo han señalado algunas autoridades estadounidenses. En su conferencia matutina, la mandataria aseguró que, aunque se han registrado casos de tráfico de esta droga en territorio nacional, la mayor parte del fentanilo y sus precursores que llegan a Estados Unidos provienen de Asia.
Las declaraciones de Sheinbaum se produjeron en el marco de la presentación de la campaña “Aléjate de las drogas, el fentanilo mata”, una iniciativa dirigida a los jóvenes mexicanos con el objetivo de prevenir el consumo de este narcótico sintético, el cual, según la presidenta, está provocando una crisis de salud en países como Estados Unidos y Canadá.
El Gobierno mexicano ha enfrentado presiones por parte de las autoridades estadounidenses, especialmente del presidente electo Donald Trump, quien ha amenazado con imponer aranceles del 25% si México no detiene la llegada de migrantes y drogas, particularmente fentanilo. Sin embargo, Sheinbaum defendió la postura de su Gobierno, asegurando que se están tomando medidas contundentes para frenar tanto la producción como el tráfico de la droga.
“Estamos combatiendo la distribución de fentanilo, tanto a nivel nacional como en la posible entrada hacia Estados Unidos. Un ejemplo claro de esto es que recientemente se incautaron más de 500 mil pastillas de fentanilo en Sinaloa”, destacó Sheinbaum, quien también recordó que su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, ya había insistido en que México no produce la droga, sino que actúa como un punto de tránsito.
La presidenta también reiteró su rechazo a un reportaje publicado por *The New York Times* el 29 de diciembre, que señaló la existencia de un laboratorio de fentanilo en el centro de Culiacán, Sinaloa, territorio históricamente vinculado con el crimen organizado y el Cártel de Sinaloa. Sheinbaum insistió en que, aunque su Gobierno lucha contra el narcotráfico, los reportajes sensacionalistas no reflejan la realidad de las acciones que se están tomando.
El fentanilo, un potente opioide sintético, ha causado una creciente preocupación en América del Norte debido a su alta capacidad de adicción y a la escalofriante cantidad de muertes que ha provocado en los últimos años, particularmente en Estados Unidos.
