El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, destacó la “necesidad imperiosa e inmediata de construir barreras y caminos físicos en la frontera de Estados Unidos a fin de evitar ingresos ilícitos”. Ecologistas denuncian los riesgos medioambientales para la zona.
El gobierno del presidente Joe Biden anunció el miércoles su decisión de dispensar la aplicación de 26 leyes federales para permitir la “construcción expedita” de una barrera fronteriza (incluyendo zonas de muro) en el sur de Texas, en un notable giro de la que había sido su política con la inmigración ilegal.
“Actualmente, existe una necesidad imperiosa e inmediata de construir barreras y caminos físicos en las inmediaciones de la frontera de Estados Unidos a fin de evitar ingresos ilícitos hacia Estados Unidos en las zonas del proyecto”, dijo el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, al hacer el anuncio.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) publicó el anuncio en el Registro Federal sin dar muchos detalles sobre la obra en el condado Starr, en Texas, el cual forma parte de un sector de la Patrulla Fronteriza que registra un elevado nivel de ingresos ilegales.
Según datos del gobierno, se han reportado alrededor de 245,000 ingresos ilegales durante el actual ejercicio fiscal en el sector de Rio Grande Valley, el cual abarca 21 condados.
En un comunicado difundido el miércoles, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos ( CBP) dijo que el proyecto se apega a la proclama de 2021. “El Congreso asignó durante el año fiscal 2019 fondos para la construcción de barrera fronteriza en Rio Grande Valley y el DHS está obligado a usar dichos fondos para su fin asignado”, indicó la CBP.
Las leyes que dispensaron para poder hacer el muro fronterizo
Aunque no se dieron a conocer mapas en el anuncio, CBP dio a conocer el proyecto en junio pasado y comenzó a recibir comentarios públicos en agosto, cuando difundió un mapa de la obra para añadir hasta 20 millas al sistema de barreras fronterizas existentes en la zona.
El juez del condado de Starr Eloy Vera dijo que la obra comenzará al sur de la presa Falcon y se extenderá más allá de Salineño, Texas.
El expresidente Donald Trump, quien había hecho de la construcción del muro (y que México pagaría por él) una de sus banderas, construyó entre 2017 y enero de 2021 alrededor de 450 millas de barreras a lo largo de la frontera.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, reanudó esas labores antes de que el gobierno federal las suspendiera al inicio del mandato de Biden.
Las leyes de Aire Limpio, Agua Potable Segura y Especies en Peligro fueron algunas de las leyes federales que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS por sus iniciales en inglés) dispensó con el fin de permitir la obra, la cual utilizará fondos que el Congreso asignó en 2019 para la construcción de un muro fronterizo. Las dispensas evitan perder tiempo en revisiones y demandas por la violación de leyes ambientales.
Las accidentadas tierras en el condado de Starr, que se ubican entre Zapata y McAllen, albergan a unos 65,000 habitantes en una extensión de unas 1,200 millas cuadradas que forman parte del Refugio Nacional de Vida Silvestre Lower Rio Grande Valley.