Según el alcalde de Nueva York, Eric Adams, se busca reducir en un 20 % el gasto destinado a los miles de inmigrantes que han llegado desde la primavera del año pasado y que, según sus palabras, han impactado negativamente las finanzas de la ciudad.
Jacques Jiha, director de la Oficina de Presupuesto de la Alcaldía, ha instruido a los líderes de las agencias para que presenten, antes del 8 de diciembre, un plan que recorte el 20 % de los gastos destinados a los inmigrantes, con el objetivo de mantener un equilibrio presupuestario para los años fiscales 2024 y 2025.
Jiha señala que el flujo de inmigrantes persiste, y de los 143.000 que han llegado a Nueva York desde la primavera de 2022, 66.000 están bajo la responsabilidad de la ciudad.
Aunque la ciudad destinó este mes 6.200 millones de dólares al plan fiscal para 2024 y 2025, destinados a cubrir los costos de alojamiento y cuidado de los inmigrantes, Jiha advierte que las brechas en las finanzas locales se han “expandido”.
Según información proporcionada por la Alcaldía a finales de octubre, el costo de mantener a los inmigrantes en el sistema se ha elevado a casi 400 dólares por persona y día.
Como parte de las medidas adoptadas por la administración de Adams para abordar la crisis humanitaria y fiscal, se ha limitado a 30 días el tiempo en que un soltero puede permanecer en un albergue, y a 60 días para las familias.