Según un estudio de la Universidad de California, los efectos negativos del uso de pantallas electrónicas en niños menores de 2 años podrían ser peores de lo que se conocía.
Los aspectos que pueden ser afectados son la comunicación, la coordinación de movimientos, la capacidad para resolver problemas y las habilidades para interactuar socialmente.
Por lo que los especialistas recomiendan qué los menores de 2 años no interactuen con ningún aparato electrónico hasta que cumplan suficiente edad para no tener repercusiones.