Cada año, el viernes previo al equinoccio de primavera se celebra el Día Mundial del Sueño, una fecha que busca concientizar sobre la importancia del descanso para la salud física y mental. En 2025, esta conmemoración tiene lugar el 14 de marzo.
El sueño es un proceso biológico fundamental para el bienestar del organismo. Durante el descanso, el cerebro y el cuerpo continúan en actividad para garantizar el equilibrio de funciones vitales. La falta de un sueño reparador puede desencadenar serias afectaciones a la salud mental y física, así como dificultades en la vida cotidiana.
Consecuencias de la privación del sueño
No dormir lo suficiente está asociado con diversos riesgos, entre ellos accidentes automovilísticos, errores profesionales y baja productividad. Además, la falta de sueño aumenta la posibilidad de desarrollar enfermedades crónicas como hipertensión, obesidad, diabetes, depresión e incluso ciertos tipos de cáncer.
Dormir las horas adecuadas es tan importante como mantener una dieta balanceada o realizar actividad física. Entre los beneficios de un descanso adecuado se encuentran la regulación de los sistemas inmunológico, cardiovascular, metabólico y neurológico.
Horas recomendadas de sueño por edad
Los especialistas sugieren distintas cantidades de descanso según la etapa de vida:
- Recién nacidos: 18 horas
- Niños: 10 a 12 horas
- Adolescentes: 8 a 9 horas
- Adultos: 7 a 8 horas
De acuerdo con la Clínica de Trastornos del Sueño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cerca del 45% de los adultos experimentan una mala calidad de sueño, lo que provoca dificultad para despertar y fatiga durante el día.
Beneficios del sueño según la Sleep Foundation
- Mejor rendimiento físico: Durante el sueño, el cuerpo produce hormonas esenciales para la recuperación y el crecimiento muscular, cruciales para atletas y personas activas.
- Control del peso: Dormir bien ayuda a regular el apetito al equilibrar las hormonas leptina y grelina, responsables del hambre y la saciedad.
Consejos para mejorar la calidad del sueño
Para garantizar un descanso reparador, es importante seguir buenas prácticas de higiene del sueño:
- Mantener horarios fijos para dormir y despertar.
- Hacer ejercicio regularmente, pero evitarlo al menos tres horas antes de acostarse.
- Evitar comidas abundantes antes de dormir.
- Limitar el consumo de cafeína, alcohol y tabaco en las horas previas al sueño.
- Dormir en un ambiente oscuro, tranquilo y con temperatura agradable.
Relación entre la luz artificial y los trastornos metabólicos
Estudios del Centro de Medicina Circadiana y del Sueño de la Universidad Northwestern han demostrado que la exposición a luz artificial durante la noche puede alterar la función metabólica, aumentar la resistencia a la insulina y favorecer el desarrollo de diabetes y enfermedades cardiovasculares.
En este Día Mundial del Sueño, expertos invitan a reflexionar sobre la importancia de establecer hábitos de descanso saludables para mejorar la calidad de vida y prevenir enfermedades.