La Corte Suprema de Estados Unidos rechazó este jueves, en una decisión de 5-4, el último recurso de Donald Trump para retrasar su sentencia penal en el caso de pagos ilícitos por silencio en Nueva York. Este fallo histórico garantiza que Trump enfrentará su sentencia este viernes, a solo 10 días de asumir su segundo mandato como presidente.
El juez Juan Merchan, quien supervisa el caso, ya adelantó que no impondrá una pena de cárcel. Sin embargo, la sentencia marcará un hecho sin precedentes: Trump será el primer presidente en juramentar con una condena penal en su registro oficial.
La audiencia, que se llevará a cabo en la misma sala donde Trump fue condenado el año pasado, representará una yuxtaposición única. Como acusado bajo la autoridad judicial y el veredicto de un jurado, Trump está a punto de convertirse nuevamente en el líder máximo de la nación, responsable de proteger las leyes y la Constitución.
Aunque el expresidente no estará presente en la corte físicamente, se unirá a la audiencia de manera virtual desde su residencia en Florida, según confirmó una fuente.
Este momento histórico subraya una vez más la naturaleza excepcional de la trayectoria de Trump, quien, a pesar de enfrentar múltiples acusaciones penales durante su campaña, logró ganar un segundo mandato. Mientras las palabras “sin precedentes” continúan definiendo su vida política, este viernes será otro capítulo extraordinario en la controvertida historia del expresidente.
Imágen cortesía: LA Times