El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó este lunes que la tasa de inflación general de México se situó en 4.44% anual durante la primera quincena de diciembre, una cifra que supera las expectativas del mercado y que marca una leve desaceleración respecto al 4.55% registrado en noviembre. Este dato sugiere que la inflación podría cerrar el año por debajo del 4.66% observado en 2023, en lo que podría ser un indicio de estabilización de los precios en el país.
El informe de Inegi indica que, en términos quincenales, el índice de precios al consumidor (IPC) creció un 0.42% en comparación con la quincena anterior. Esta variación es inferior al incremento de 0.52% registrado en el mismo periodo de 2023, cuando la inflación anual era ligeramente mayor, del 4.46%.
Por otro lado, el índice de precios subyacente, que excluye productos con alta volatilidad como los alimentos y los energéticos, registró un incremento del 0.5% en el periodo quincenal y un aumento del 3.62% en términos anuales. Este índice es considerado un mejor parámetro para evaluar la inflación estructural del país.
En cuanto a los componentes de este índice, el subgrupo de mercancías experimentó un alza del 0.44% en la quincena y del 2.44% en el acumulado anual, mientras que los servicios aumentaron un 0.56% quincenal y un 4.88% anual.
Por su parte, el índice de precios de los productos no subyacentes, que incluye alimentos frescos, energéticos y otros bienes de alta volatilidad, registró un aumento del 0.16% en la quincena y un 7% en términos anuales.
Este reporte refleja la persistente presión sobre los precios de los servicios y productos básicos, aunque la tendencia general parece ser una desaceleración en la inflación en comparación con los picos alcanzados a mediados de año, cuando la tasa anual llegó a superar el 5.5%.
El informe de Inegi sugiere que, aunque la inflación sigue siendo un tema relevante para la economía mexicana, la tendencia a la baja en las últimas quincenas podría indicar un posible alivio para los consumidores en el inicio del próximo año. Sin embargo, las autoridades económicas seguirán monitoreando los precios en los próximos meses, ante la posibilidad de que factores externos e internos sigan influenciando la dinámica inflacionaria.
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