Chilpancingo, Gro. – El alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue brutalmente asesinado y decapitado ayer, en un hecho que ha conmocionado a la capital de Guerrero. Según fuentes de seguridad, los homicidas dejaron su cabeza sobre el toldo de una camioneta blanca, mientras que el cuerpo fue hallado en el interior del vehículo, cubierto con una sábana gris.
Arcos Catalán, de 43 años, militante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), había asumido el cargo de alcalde apenas seis días antes, tras haber ganado las elecciones de junio pasado en alianza con el PAN y el PRI. Su asesinato se produce tan solo días después del homicidio de Francisco Gonzalo Tapia Gutiérrez, secretario general del ayuntamiento, quien fue ejecutado en pleno centro de Chilpancingo el pasado jueves.
El vehículo con los restos del alcalde fue localizado ayer alrededor de las 17:30 horas en la calle Moctezuma, en la colonia Villa del Roble, cerca del Hotel Real Moreli, uno de los accesos hacia la ciudad de Tixtla, a 14 kilómetros de la capital del estado. Las autoridades acudieron al lugar tras recibir el reporte de un automóvil con restos humanos.
La Fiscalía General del Estado emitió un comunicado confirmando la muerte de Alejandro Arcos Catalán, sin brindar más detalles, y señalando que se ha abierto una investigación por “homicidio calificado”.
Arcos Catalán, cercano al exgobernador Ángel Aguirre Rivero, era conocido por su compromiso con las causas sociales. Su última actividad pública registrada en redes sociales fue un recorrido por la comunidad de Tepechicotlán para atender a los damnificados por el huracán John, apenas unas horas antes de su trágica muerte.
Imágen cortesía: Saber Votar
